En una reciente entrevista con Los Angeles Times, Jeremy Strong se pronunció sobre la polémica de que actores heterosexuales interpreten personajes homosexuales, afirmando que las críticas al respecto son “absolutamente válidas”.
Strong, quien es conocido por su papel en la aclamada serie Succession, está a punto de encarnar al controvertido abogado Roy Cohn en el biopic The Apprentice, que también cuenta con Sebastian Stan en el papel de un joven Donald Trump.
Roy Cohn es una figura compleja en la historia estadounidense, famoso por su papel en la Lavender Scare de la década de 1950, un período marcado por la persecución de personas LGBTQ+.
Complejidad de Cohn
A pesar de su notable influencia, Cohn nunca admitió públicamente su homosexualidad y falleció en 1986 por complicaciones relacionadas con el SIDA. Su vida y legado han sido explorados en diversas obras, incluyendo la famosa Angels In America, que ha contribuido a su representación en medios LGBTQ+.
Strong, al ser interrogado sobre la necesidad de que los actores gais interpreten roles homosexuales, subrayó que, aunque no es estrictamente necesario, sería beneficioso que se le diera más importancia a esta práctica.
“Soy un poco anticuado en mi creencia de que, fundamentalmente, se trata de la habilidad de un artista para cambiar la naturaleza de su ser. Ese es tu trabajo como actor”, dijo.
Sin embargo, el actor también enfatizó que, independientemente de la orientación sexual del intérprete, es crucial abordar cualquier personaje con seriedad y respeto.
Jeremy destacó que quienes interpretan estos papeles deben entender y conectar profundamente con las luchas de los personajes, afirmando que si no creyera poder hacerlo con Cohn, no habría aceptado el rol.
The Apprentice, que explora la vida de Cohn y sus interacciones con figuras políticas de renombre, se estrena en cines el 11 de octubre, prometiendo ofrecer una mirada profunda y reflexiva sobre una de las figuras más polémicas de la historia estadounidense.