El mes de octubre del 2024 ha sido atípico en la historia de las contiendas electorales en Puerto Rico, desde la amplia distribución de votos adelantados por correo, denuncias de fraude y el resurgimiento del conflicto entre la candidata a la gobernación por el Partido Nuevo Progresista (PNP), Jenniffer González Colón, y el aspirante al Senado por Proyecto Dignidad (PD), César Vázquez. A solo 11 días de las elecciones generales del 5 de noviembre, las tensiones continúan.
El suceso más inesperado surgió estas últimas semanas cuando Griselle Morales, esposa del candidato a la gobernación por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Juan Dalmau, sufrió una hemorragia cerebral el pasado 15 de octubre, por el cual aún se encuentra “bajo observación constante”. El debate de Teleonce, con unión con el periódico Metro, inicialmente se pospuso y finalmente se canceló en solidaridad con el candidato.
Luego se anunció que González Colón no participaría del tercer debate de los candidatos gobernación en Telemundo, en apoyo a la situación familiar de su contrincante. Mientras, el candidato a la gobernación por el Partido Popular Democrático (PPD), Jesús Manuel Ortiz y de PD, Javier Jiménez permanecieron en un programa con cambio de formato titulado “Cruce de Ideas”.
Ante el panorama, Metro Puerto Rico entrevistó a expertos del ámbito político para analizar cómo estos eventos podrían influir en los votantes.
“Claro que tiene un efecto, porque él [Damau] no ha podido estar presencial en los últimos días de la campaña, donde básicamente los candidatos es motivar a tu gente a salir a votar. […] Así que el énfasis en esta etapa final es básicamente movilización, animar a tu gente. Así que el efecto de la no presencia de Juan, yo creo que donde más lo ha afectado es en los debates porque eran una oportunidad última que tenían los candidatos para presentar sus ideas y confrontar las ideas de los otros candidatos”, detalló el exdirector de campaña de Wanda Vázquez, Jorge Dávila.
Dávila, además expresó que hubieran cancelado todos los debates decisivos dado a que, no sería “justo” los ataques hacia un candidato que no se encontraría presente.
“El evento de Juan Dalmau, o sea, todo el mundo sabía que los días críticos, porque lo dijeron los médicos, caían esta semana. […] Yo creo que se deberían haber cancelado todos, todos los debates. […] Porque me parece que es injusto para Juan Dalmau, el que debatan las otras tres personas. […]”, continuó el exdirector.
Mientras, la exdirectora de campaña de David Bernier en el 2016, Liza Ortiz, dijo que a casi dos semanas de las elecciones generales, las peculiaridades no cambiarán la perspectiva del elector.
“Ya a dos semanas de las elecciones el impacto en el electorado es cero. A menos que sea una controversia que se salga de las manos, una negativa. Lo más que está buscando el elector ahora es información”, dijo.
Ortiz concordó con Dávila en que, aunque la situación sea una delicada, la pausa de la campaña de Dalmau podría tener un efecto.
“Él es el main focus, el foco de esa alianza. No hay nadie en esa alianza que tenga la fuerza que él tiene, solo. […] Las campañas siguen su ritmo, están en la calle, ya la gente sabe por quién va a votar, están bastante definidos. En este momento lo que están buscando es más información”, continuó Ortiz.
La exdirectora también hubiera preferido que los cuatro candidatos estuvieran en el debate. Pero, confesó que los contrincantes que participarán son los más que deben presentar sus propuestas para convencer al elector.
Puedo entender que desde el punto de vista de estrategia política, si no hay uno, pues que el que piensa que está adelante no quiera ir al debate. […] Ahora, los otros dos candidatos que sí van a participar, son los que más necesitan llevar su mensaje. No tengo números para constatarlo, pero no me parece que vaya alguien a barrer por todo esto que se está dando, por ser tan atípica [la contienda]”, incluyó.
Mientras, para el expolítico popular, Jorge Colberg, la situación que el candidato pipiolo se encuentra enfrentando no solo lo afecta a él, sino a todos los candidatos. Incluso, añadió que el mayor reto sería la reevaluación de cada candidato sobre su campaña debido al abrupto incidente.
“[…] Tienen que evaluar también su candidatura, sus campañas, porque ahora mismo el tema de los debates, como tú manejas un debate, vas a hacer un ataque a un candidato que no está para defenderse, para escuchar su punto de vista, también es un problema porque entonces puede tener un efecto adverso, al que lanza el ataque en su ausencia”, comenzó Colberg.
Sin embargo, no piensa que la ausencia de Dalmau motivó un éxodo de votos sino que se ha presentado una gran ola de apoyo y solidaridad.
“Yo no creo que haya habido un éxodo de un lado u otro de electores moviéndose porque el hecho de que Juan Dalmau no esté en un foro vaya perdiendo votos masivamente. No creo. Yo creo que la gente al contrario está muy solidario con él con su familia y que hay un entendimiento que hay una situación particular que requiere ese respeto, ese civismo, esa madurez como País y yo creo que todo el mundo lo ha demostrado”.
En torno a la decisión de la candidata PNP de retirarse del debate, Colberg lo describió como una “decisión estratégica”.
“No hay duda que esto es una decisión estratégica. […] Obviamente no se trata de evitar exponencia, pero por otro lado, yo también creo que puede haber un efecto sobre los otros tres candidatos, el hecho de tú estar en un debate los tres en donde comiencen a atacar a [un contrincante] y no está para defenderse. Eso puede tener un efecto adverso sobre ella y sobre los otros dos tambié, así que yo creo que ella hizo una evaluación”, concluyó.