Esta semana, el candidato independentista a la gobernación, Juan Dalmau, retomó sus apariciones públicas relacionadas a su campaña luego del lamentable incidente de su esposa. No hay duda que el candidato independentista tiene ‘momentum’, y no es algo de ahora.
Dalmau es el candidato más carismático de esta contienda electoral y ha sabido explotar a su favor, y a la menor provocación, cualquier controversia, excepto las irregulares elecciones de Venezuela que mostró una vulnerabilidad del candidato al negarse a condenar el régimen dictatorial de Nicolás Maduro y a establecer que Venezuela vive una dictadura. Maduro se perpetuó en el poder sin evidencia alguna de que obtuvo mayoría de votos, comenzó a perseguir y encarcelar a su oposición y la alianza independentista le huyó “como el diablo a la cruz” a ese tema, aunque en otras controversias de otros países soberanos, sí, se insertan en la discusión.
Juan Dalmau tiene los planetas alineados para ganar en términos de estrategia: un sector de la población descontento con los dos partidos principales, el apoyo de exponentes como Bad Bunny, René Pérez, Ricky Martin, y otros que utilizan sus plataformas para hacerle campaña, figuras del Partido Popular Democrático (PPD) apoyándolo directa e indirectamente, entre otros.
El valor de los endosos y la campaña de estos intérpretes, en términos de tener alcance mediático y de impactar la opinión pública, así como el electorado, es incalculable. Por tal razón, en caso que la comisionada residente prevalezca en las elecciones, pues estaría echándose en el bolsillo a estos tres y a otros, independientemente del margen.
Obviamente no debemos menospreciar un resultado en el que Juan Dalmau no prevalezca. Mucho menos si se coloca cerca de quien llegue en primer lugar. Sería un hecho histórico. Algunos analistas y/o comentaristas entienden que si Dalmau no prevalece, al ser su tercera derrota en una aspiración para la gobernación, ya estaría prácticamente descartado para el 2028. Difiero totalmente. Si el candidato independentista llegara en segundo lugar se convertiría en el principal líder de oposición. ¿Tendría posibilidad de prevalecer en 2028? Quien podría convertir a Juan Dalmau en gobernador sería Jenniffer González, si prevaleciera ella en esta elección del 2024, y no es complicado entenderlo.
Nadie puede negar que hay un hastío de lo que es el Partido Nuevo Progresista (PNP) y el PPD gobernando, y si Jenniffer González prevalece por escaso margen, es cuestión de un soplito para que Juan Dalmau juramente el 2 de enero del 2029 como el primer gobernador independentista. Uno mira figuras alrededor de la campaña de González y hay personas muy serias, pero también hay tiburones olfateando sangre para dar el charrascazo y llenar sus bolsillos pensando que puede ser su última oportunidad.
Igualmente, hay figuras embriagadas de poder sin haber ganado, con aires de superioridad, prepotencia y arrogancia. Son los peores enemigos de la candidata y los que más daño le harán. Creo que seguiremos viendo las controversias de los contratos directos o indirectos a figuras allegadas a la campaña, algo que aborrece el país. ¿Por qué pienso que va a seguir siendo el pan nuestro…? Porque sin haber ganado la gobernación, y terminando una campaña en la que se usó eso mismo contra el gobernador Pedro Pierluisi, tuvimos el caso del licenciado Oriol Campos, integrante de la campaña de González, en el Departamento de Educación. Jenniffer González será quien decida con su gobierno si va a ser la última gobernadora del bipartidismo tradicional. Está en sus manos si permite lo que siempre se ha permitido.
Adelantándome en análisis a un posible triunfo de Juan Dalmau en esta elección o en 2028, si es que sucediera, con su gobernación es altamente probable que Puerto Rico vuelva a estancarse en un choque de poderes. Si se fijan, el pedido de voto es solo para Dalmau y casi nada, por no decir nada, para una Legislatura de la alianza independentista. Saben que no hay posibilidad alguna de que la Legislatura pueda ser controlada por la alianza. ¿Puede un gobernador echar adelante al país con una Legislatura que no responda a su política pública? Lo vimos en 2008 y en este cuatrienio; la respuesta es que no. En la isla, no hay madurez para eso. Obviamente, el libreto ya está hecho: “no pude gobernar como quería por culpa de la Legislatura”. ¡Déjà Vu!
Si no ganara en esta contienda, yo sí veo a Juan Dalmau aspirando nuevamente en 2028. Sería el candidato con crecimiento electoral constante. No obstante, en caso de que no aspirase por la razón que fuera, ¿quién pudiera ser? Al ser Manuel Natal una de las figuras políticas que, en 2020, se convirtió en la sorpresa de casi ganar la alcaldía de San Juan y ser parte de la alianza independentista, pues pudiera uno pensar que sería el sucesor natural. Sin embargo, durante este cuatrienio no ha demostrado ser un político maduro y proyecta ser más un chamaquito jaquetón, enamorado perdidamente de sí mismo y que se pasa más en las redes sociales peleando hasta con su sombra sin dar “un tajo por la patria”… o sea, sin trabajar de verdad.
La única figura que pudiera ser una con posiblidad para aspirar, con seriedad, sería Alexandra Lúgaro. Es una política aguerrida, madura y con juego de pies. Hace unos días, corrió en las redes un video donde prácticamente se almuerza, con argumentos y fundamentos, a un colega de medios que gusta fanfarronear y proyectar que tiene intelecto privilegiado. Lúgaro es una persona preparada y no se deja, menos de tipos que tienen necesidad de intentar ser macharranes, quizás para satisfacer alguna otra deficiencia en su ser o algún complejo.
En el caso de Natal, el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) evidentemente no confía en él para ser la figura de la alianza, más por su carácter volátil, narcisista y engreído, aparte de no haber sido pipiolo leal añejado. En el caso de Lúgaro, pues el PIP es una especie de ‘Opus Dei’ político, y dudo que dejen que una figura que no ha participado del juego de sillas musicales por varios años venga de afuera a ser la figura principal de una fraternidad política.
El miércoles que viene podremos tener algún panorama del 2028.