Con un Congreso de los Estados Unidos en su mayoría republicano, un presidente controvertible como Donald Trump y una gobernadora republicana, en Puerto Rico podrían surgir nuevas discusiones sobre los derechos humanos y temas como el estatus político durante el cuatrienio que está por empezar.
Para la catedrática de Ciencias Políticas de la Universidad de Puerto Rico Recinto de Río Piedras, Luz del Alba Acevedo, hay cuatro factores primordiales en los que la próxima administración conservadora incidirá: los fondos federales, el Departamento de Educación Federal, los derechos reproductivos de las mujeres y la estadidad.
“Trump es bien claro en sobre cuáles son sus prioridades para estos primeros 100 días de su presidencia. Una de las cosas es hacer una deportación masiva y bregar con el asunto de la inmigración, eso implica una movilización masiva de recursos tanto financieros como de capital humano. […] En ese sentido, esos recursos se van a estar utilizando, es decir, va a haber un vacuum cleaner de todos los fondos que no se estén utilizando y Puerto Rico va a caer en esa redada”, dijo la profesora sobre los fondos federales.
Asimismo, aplicó la misma lógica al Departamento de Educación (DE), señalando que, al ser la agencia gubernamental con mayor asignación de fondos federales, podría verse forzada a una reestructuración. Del Alba Acevedo también indicó que el presidente electo, Donald Trump, buscará eliminar el Departamento de Educación Federal, lo cual afectaría significativamente la gestión del departamento en Puerto Rico.
“Es decir, hay un cuestionamiento sobre cómo se manejan y se utilizan los fondos federales en el Departamento de Educación de Puerto Rico. Eso ya está ahí, con ese trasfondo y con esa mentalidad de que quiere hacer una transformación quirúrgica del Departamento de Educación Federal. Eso definitivamente va a afectar los fondos federales que vienen dirigidos a el territorio, a Puerto Rico, para el asunto de la educación”, continuó.
El tercer factor listado por la catedrática fue los derechos reproductivos de las mujeres, detallando que el triunfo de Trump en los Estados Unidos y su secuela en la colonia se manifestará en erradicar el derecho al aborto.
De hecho, añadió que la legislatura de Puerto Rico contará con proyectos con dimensiones más “crudas” a los ya fueron presentados durante el cuatrienio pasado por la senadora de Proyecto Dignidad (PD), Joanne Rodríguez Veve.
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“Ciertamente con el triunfo de Donald Trump en los Estados Unidos y su secuela en la colonia lo que vamos a ver es una vuelta más virulenta, a querer erradicar los derechos reproductivos de las mujeres. Vamos a volver a ver en la legislatura de Puerto Rico otra ola de proyectos que pueden ser similares a los que ya presentó la senadora de Proyecto Dignidad el cuatrienio pasado, es decir, otro refrito, o con otras dimensiones probablemente mucho más crudas, con respecto al aborto”, detalló.
Conforme a Del Alba Acevedo, el derecho al aborto en la isla se sostenía por dos vías: Roe v Wade y el caso de Pueblo v Duarte. Después de la derogación del Tribunal Superior de Roe v Wade, el derecho al aborto en Puerto Rico se sostiene por el estatuto del Estado Libre Asociado (ELA) basado en la decisión del Tribunal Supremo local en el caso Pueblo v. Duarte, la cual estableció que el aborto es un derecho constitucional para las mujeres por ser parte del derecho a la intimidad consagrado por la constitución de Puerto Rico.
Por su parte, el presidente del Partido Republicano en Puerto Rico, Ángel Cintrón, indicó que los derechos reproductivos de las mujeres es un tema planteado por el Tribunal Supremo superior, por lo que le tocaría a cada estado determinar su decisión.
“[…] No es el Congreso el que lo va a determinar. Así que es un asunto transparente, no tenemos un decir en eso”, dictó.
El cuarto factor listado por la profesora fue la estadidad, tema que ha invocado movimiento tanto local como estadounidense cuando saliente líder senatorial republicano, Mitch McConnell declaró que “no se estarán aceptando nuevos estados” el miércoles. Para Del Alba Acevedo, el Partido Nuevo Progresista (PNP) no dará “ningún tipo de avance” sobre el estatus.
“Podría haber algún tipo de humillación […] siempre lo presentan al Congreso como si los puertorriqueños hubieran preferido masivamente la estadidad como la fórmula de estatus para resolver esta cuestión. Pero, eso es completamente falso. […] Esta papeleta no significa nada para ellos porque no era vinculante, no es su prioridad entender ese issue”, confesó.
En el plebiscito criollo presentado durante las elecciones generales del 5 de noviembre, la estadidad sacó un 56.87% con un total de 540,635. La independencia resultó en un 30.84% con una totalidad de 293,224 votos.
Cintrón defendió la propuesta que se llevará a cabo sobre la estadidad al Congreso e indicó que los resultados de la independencia no aguardan relevancia.
“La estadidad está en un 57% y puede subir más con el escrutinio general ahora y el voto adelantado. Va a estar mucho más arriba de lo que nunca antes ha estado. Y yo creo que eso es un mandato más que claro para el Congreso de los Estados Unidos, porque lo importante ahí no es cuántos votos tenga la independencia, lo importante es cuántos votos tenga la estadidad, que es la solicitud que estamos haciendo al Congreso”, concluyó.
¿Inclusión o estrategia?
Ante la posibilidad de Trump nombrar al senador republicano y latino, Marco Rubio como el próximo secretario de estado, Del Alba Acevedo aseguró que se trata de una decisión estratégica que impactará positivamente en las emociones de los cubanos en los Estados Unidos y los latinos en Florida.
“Se ha hecho una composición aquí porque Marcos Rubio no pertenece al grupo de la MAGA, sino que pertenece a los republicanos más tradicionales, aunque él una vez fue derrotado por Donald Trump, empezó a moverse, a moverse dramáticamente a favor de Trump, llegando cerca a él. […] Ciertamente ahí ha puesto una semilla que puede dar frutos en términos de que ese sector de los latinos, cubanos, republicanos, ultraderechistas”, destacó la catedrática.
Entre tanto, el presidente del Partido Republicano local detalló que trata de una decisión que incidirá positivamente en la política económica de la isla, debido a la historia que tiene Rubio con Puerto Rico.
“Definitivamente que es bueno para Puerto Rico y para los hispanos en general, primero porque Marco, como todos sabemos, es de ascendencia cubanoamericana. En el caso de Puerto Rico, Marco fue el candidato que en el 2016 el Partido Republicano de Puerto Rico apoyó en primarias, no olvidemos eso, fue el candidato que ganó aquí, en la primaria del año 16 para presidente de Estados Unidos. Así que hay una relación de mucha cordialidad de Marco Rubio con Puerto Rico y con las causas de Puerto Rico”, dijo.