La presidenta del Colegio de Administradores de Servicios de Salud (CASS), Rosa Castro, hizo un llamado este viernes al Negociado de Energía de Puerto Rico (NEPR) para que excluya a los hospitales del aumento del 9.5 por ciento en la tarifa de luz, programado para entrar en vigor en enero de 2025.
Castro dijo en declaraciones escritas que el incremento tendría un impacto “devastador” en las instituciones de salud de la Isla, quienes enfrentan una crisis financiera “sin precedentes”. De la misma forma, sostuvo que se trata de un asunto de “vida o muerte”.
“Los hospitales no pueden seguir siendo castigados con aumentos desproporcionados mientras luchamos por mantener las puertas abiertas y ofrecer servicios de calidad. Somos instituciones esenciales que salvan vidas, y cualquier impacto negativo sobre nuestra operación afecta directamente a nuestros pacientes y comunidades”, aseguró.
La doctora destacó que el aumento en la tarifa eléctrica empeorará una situación financiera ya insostenible para los hospitales, quienes además enfrentan altos costos operativos debido a la inflación y al reemplazo de equipos dañados por apagones y fluctuaciones eléctricas.
De la misma forma, dijo que a esto se suman los incrementos salariales exigidos por ley y la necesidad de invertir en beneficios para retener y reclutar profesionales de la salud.
“Este aumento será uno millonario anualmente para los 135 hospitales y 79 salas de emergencia que tiene la Isla. A esto le suma que en los últimos años, hemos visto un preocupante aumento de hospitales que se ven obligados a declararse en reorganización, cerrar sus puertas o implementar medidas extremas de reestructuración, incluyendo despidos masivos de empleados. Estas acciones no solo reducen el acceso a servicios de salud, sino que también afectan la economía y la estabilidad social de nuestras comunidades”, explicó.
Castro también criticó que los hospitales sean tratados bajo las mismas normativas que los sectores comerciales, al tiempo que pidió al NPPR otorgar a los centros de salud el mismo descuento en tarifas eléctricas que se brinda a los hoteles.
“Reconocemos la importancia del turismo y otros sectores estratégicos, pero los hospitales cumplen una misión irremplazable: salvar vidas. El apoyo al sector salud debe ser prioritario en cualquier política pública. El acceso a servicios de salud de calidad es un derecho fundamental y no puede seguir siendo comprometido por decisiones que no toman en cuenta nuestra misión esencial. Solicitamos audiencia al Negociado de Energía y los exhortamos a actuar con sensibilidad y responsabilidad, reconociendo que la sostenibilidad de los hospitales es indispensable para el bienestar y la seguridad de nuestra sociedad”, concluyó la presidenta del CASS.