Al cierre de la última semana, solo 48 municipios habían registrado sus presupuestos y contratos relacionados con los eventos de Toma de Posesión de las respectivas alcaldías en la Oficina del Contralor, sumando un total de $3,175,278.
Este monto incluye fondos públicos, aunque, como explicó el alcalde de Vega Baja y presidente interino de la Asociación de Alcaldes de Puerto Rico, Marcos Cruz, puede haber una combinación de fondos públicos y privados.
“En muchas ocasiones hay algunos que los financian con fondos públicos. Hay otros que hacen una combinación de fondos privados. Y en realidad va a depender de cada una de las municipalidades, de cómo estén sus finanzas y qué tipo de actividad quisieran llevar a cabo”, señaló Cruz, quien también destacó que la mayoría de las actividades este año han sido realizadas en espacios cerrados, como teatros, para reducir costos.
Los contratos municipales para las juramentaciones en diversas alcaldías listan una variedad de contrataciones, desde servicios artísticos, fotográficos, promotores de espectáculos y de coordinadores de eventos. Sin embargo, los presupuestos de estas ceremonias varían ampliamente entre los municipios.
El caso más notable es el de Ponce, donde la toma de posesión de la alcaldesa Marlese Sifre tuvo un presupuesto de $485,000, seguido por Mayagüez con $190,000, Aguadilla con $159,225 e Isabela con $156,500.
El presupuesto para la toma de posesión de Ponce es 2.5 veces mayor al de Mayagüez, y es aproximadamente 45.6 veces mayor que el de San Germán, el municipio que menos gastó, con un presupuesto de $10,395.
Según una herramienta desarrollada por la organización sin fines de lucro ABRE Puerto Rico, Ponce y Aguadilla presentan un estado de salud fiscal vulnerable, mientras que Mayagüez tiene uno estable e Isabela uno saludable.
Metro Puerto Rico pidió el presupuesto de la toma de posesión del alcalde de San Juan, Miguel Romero, pero no se cumplió con lo solicitado.
!function(){“use strict”;window.addEventListener(“message”,(function(a){if(void 0!==a.data[“datawrapper-height”]){var e=document.querySelectorAll(“iframe”);for(var t in a.data[“datawrapper-height”])for(var r=0;r<e.length;r++)if(e[r].contentWindow===a.source){var i=a.data["datawrapper-height"][t]+"px";e[r].style.height=i}}}))}();
Según Cruz, la Ley no establece un límite presupuestario para estos eventos. “La ley lo que establece es que se debe separar una cantidad para los actos de toma de posesión. Y de acuerdo a la solidez de las finanzas de cada municipio, pues entonces se proyecta. Regularmente las tomas de posesión son precedidas por un acto religioso. Luego de ese acto religioso, pues entonces va lo que sería la toma de posesión. Finalmente, el mensaje que se le da al pueblo y tradicionalmente se hace un baile de celebración”, detalló el alcalde.
Por su parte, la catedrática retirada de la Escuela de Administración Pública de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Palmira Ríos, cuestionó el uso de fondos para estas ceremonias, especialmente en el contexto de “crisis fiscal” que atraviesan los municipios.
“Yo tengo serias dudas sobre eso, sobre todo en el contexto presente. Se solía estar invirtiendo los pocos fondos que tienen los municipios, muchos que están casi a punto, si no están de bancarrota, y se está advirtiendo de que muchos de ellos podrían desaparecer, que se estén utilizando los pocos fondos disponibles para un acto social casi protocolar, que realmente no es algo fundamental. Yo sé que todo este año ha sido, para mí, sorprendente, pero no falta el chocante de que todavía se estén haciendo ese tipo de ceremonias con todo el gasto que eso implica”, expresó Ríos.
Además, la académica subrayó la desconexión entre estas inversiones y las necesidades reales de los municipios, subrayando una falta de “consistencia”.
“No es consistente con todo el discurso que estamos escuchando de líderes municipales sobre la situación crítica que enfrentan los municipios en Puerto Rico. En los municipios en particular, hay muchos que están enfrentando una bancarrota total. Los municipios pequeños, cuyo presupuesto está bien limitado, que tienen muchísimas responsabilidades, algunas que son de nivel de seguridad para proteger la salud de sus residentes y ciudadanos, no tienen los recursos para poder sostener esas actividades. Pero sí se está gastando en inauguración, que solamente es cuestión de juramento, y algunos están continuando, así que realmente no hay nada nuevo”, continuó.
Por consiguiente, Ríos advirtió sobre la necesidad de mayor transparencia con el uso de fondos, incluyendo aquellos provenientes del sector privado.
“Habría que ver, inclusive, que no hayan conflictos de intereses cuando son fondos con donaciones del sector privado, que no sea algo que vengan con conflictos de intereses. Pero nuestros municipios, todos las ciudadanías tienen muchísimas necesidades que deben estar por encima de eso, sobre todo una juramentación del alcalde o alcaldesa”.
Ríos, además, enfatizó que es un momento para priorizar las necesidades esenciales.
“Es un momento de ahorrar, de empezar a planificar mejor actividades futuras y no estar gastando en ese tipo de actividad. Realmente hay que establecer mejor las prioridades de prestación de servicios a los municipios y todas estas actividades” concluyó la catedrática.