Cuidar de la piel es algo esencial para mantener un rostro reluciente y una apariencia brillante y saludable. No obstante, los tratamientos para el cuidado del rostro no suelen ser tan económicos, y muchas veces es mejor recurrir a tratamientos caseros los cuales resultan ser más asequibles.
Mezclando múltiples productos naturales que solemos tener en casa, se puede realizar varias mascarillas faciales caseras que resultan ser una opción económica y en ocasiones, muy bien recibida por la piel.
A continuación te damos varios ejemplos:
Mascarilla de aguacate y tomate para la piel seca
Con ½ aguacate picado, una cucharada de jugo de limón y una cucharada de jugo de tomate, podrás hidratar tu piel, eliminar manchas y aportarle vitaminas A, B6, E y C.
Solo debes mezclar todos los ingredientes hasta obtener una pasta uniforme. El jugo del tomate y limón debes obtenerlo directamente de la fruta. Aplica en la zona del rostro y cuello, y deja actuar durante 25 minutos. Retira con abundante agua y seca con una toalla limpia. No te expongas al sol en las próximas 12 horas.
Mascarilla de leche, naranja y miel para todo tipo de piel
Si tu rostro se ve cansado, haz esta mascarilla con tres cucharadas de leche (45 ml), dos cucharadas de zumo de naranja (30 ml) y una cucharada de miel (15 g). Mezcla bien todos los ingredientes y aplícala únicamente en las noches, máximo dos veces a la semana.
Deja actuar esta mascarilla durante 20 minutos, después enjuaga con agua. De esta forma, obtendrás tonificación e iluminación gracias a la vitamina C y antioxidantes que aportan estos ingredientes.
Mascarilla casera de avena y limón para pieles grasas
En una taza mezcla dos cucharadas de copos de avena, dos de yogur y dos de zumo de limón. Aplícala dando suaves masajes, déjala actuar por 15 minutos y sácala con abundante agua. Así podrás deshacerte de todos los puntos negros. Puedes finalizar aplicándote una crema hidratante.