El presidente del Colegio de Médicos Cirujanos (CMC), Carlos Díaz Vélez, reveló que el actual secretario designado del Departamento de Salud (DS), Víctor Ramos Otero, cuando presidió el colegio, efectuó pagos ascendentes a $159,000 a un prestamista ilegal sin autorización previa de la Junta de Gobierno de la institución.
Según los documentos compartidos por Díaz Vélez en rueda de prensa, y que proveerá al Senado para su evaluación, 41 cheques emitidos a un usurero entre enero de 2018 a agosto de 2021 para pagos de intereses alcanzaron un total de $128,000, cuyos fondos provenían de las acciones del plan. Otros $31,000 en pagos originaban de fondos propios del CMC.
También hubo desembolsos por $85,708 a un familiar del nominado y $125,734 a una amistad de ese pariente, cuyas identidades no identificó y quienes estaban bajo la nómina del usurero, que, por definición, impone intereses excesivos.
Las acciones de los colegiados, que estaban reservadas en una cuenta de plica, fueron transferidas a una cuenta de cheques en la cooperativa Medicoop para efectuar estos pagos en plazos de $4,000. Así, la inversión no tenía que ser registrada en la Junta de Gobierno del CMC, que, por reglamento, dispone que toda inversión mayor a $5,000 debe ser avalada por el cuerpo.
“Se cuela entre los gastos que hay en los informes y no se ve en la junta. Se justifican, porque son informes generales. Eso ocurre y, por lo tanto, no teníamos el conocimiento”, sostuvo Díaz Vélez.
Actualmente, la cuenta, que almacenaba $1.27 millones, ahora tiene 859 dólares.
Asimismo, en un proceso para adquirir licencias con la aseguradora Golden Cross, unos $250,000 se perdieron por fianza tras que la Oficina del Comisionado de Seguros hallara que la corporación CMC Care Holdings, creada para la administración del supuesto plan, no contaba con fondos suficientes y cerró la solicitud.
“Nunca hubo plan. Nunca hubo licencia. No hubo nada”, declaró el cardiólogo.
Por estas movidas sin consulta con la Junta de Gobierno, Ramos Otero fue suspendido de ese cuerpo cuando era presidente saliente, que, según Díaz Vélez, fue la primera vez que sucedió.
El actual presidente del colegio negó, además, que CMC Care Holdings pasó a nombre suyo, como alegó Ramos Otero en declaraciones autorizadas previamente.
El cardiólogo expresó contundentemente que no avala la nominación de Ramos Otero como secretario de Salud, aunque algún miembro de la junta del CMC discrepe de su posición. Enumeró también otros puestos a los que aspiró el pediatra que tampoco alcanzó, como la vicepresidencia del Colegio tras su salida y la presidencia del Distrito de San Juan.
Díaz Vélez destacó también que Ramos Otero, el lunes 17 de marzo, renunció al Colegio, lo que lo absuelve de ser sometido a querellas de ética que iban a ser atendidas internamente.
Joaquín A. Rosado Lebrón cubre salud para Metro Puerto Rico a través del programa Report for America.