El profesor de derecho electoral y exalcalde de San Juan, Héctor Luis Acevedo, reclamó este domingo a la gobernadora, Jennifer González Colón, que busque el consenso para los nombramientos electorales más allá de su partido político.
“En ocho de diez ocasiones se han logrado hacer esos nombramientos por unanimidad desde 1983 y esa es la forma como mejor se sirve a la democracia puertorriqueña. La norma acordada desde 1983 es que el presidente de Comisión tenga el respaldo de más de un solo partido político”, expresó Acevedo en declaraciones escritas.
“La naturaleza de la política electoral es la confrontación de opciones y visiones con dos excepciones. Una, cuando se establecen las reglas y nombramientos para dirimir las diferencias en una democracia como lo son los procesos electorales y la otra cuando hay división de poderes”, agregó.
El exlíder capitalino resaltó que el juez Jorge Rivera Rueda, quien será evaluado este lunes por la Comisión de Gobierno de la Cámara de Representantes para presidir la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), ha sido rechazado anteriormente por todos los partidos de oposición por su activismo político. Rivera Rueda fue partícipe de la redacción de la actual ley electoral de 2020.
“Esa ley tiene un historial que se ilustra en lo siguiente:
1. Disponía la eliminación de la papeleta electoral lo cual fue objetado por el gobierno federal y el FBI por ser vulnerable al fraude.
2. Fue declarada inconstitucional por el Tribunal Supremo de PR en 2021 en el caso de Rodríguez Ramos v. CEE, por voz del Juez Eric Kolthoff por no respetar la intención del elector en los casos de nominación directa y por dar rango superior a las máquinas por encima de la voluntad del elector.
3. Fue declarada inconstitucional en el caso Senado v. Tribunal Supremo en 2021 en cuanto al nombramiento del presidente de la CEE por dicho Tribunal por voz del Juez Martínez Torres por violar la separación de poderes constitucionales”, detalló.
Ante ello, Acevedo recordó el proceso atropellado en las elecciones de 2024.
“Lo sucedido en estas elecciones de 2024 debe servirnos de lección: se enviaron papeletas dobles por correo, muchas máquinas no procesaban las papeletas correctamente, pues no se calibraron o no se probaron correctamente, se negaron a investigar decenas de votos por correo en una sola dirección en Santa Isabel lo que decidió la alcaldía, se negaron a investigar cientos de votos invalidados en Isabela lo que decidió un escaño senatorial, se negaron a adjudicar los votos de nominación directa por semanas violando el mandato constitucional y se invirtieron los resultados de dos opciones plebiscitarias alterando más de 170,000 votos”, destacó.
Afirmó que esta situación hace de mayor importancia el invitar al consenso en los adjudicadores y administradores del proceso electoral.
“Es hora de cambiar la dirección de la confrontación a la cooperación y el consenso. Con las reglas electorales no debemos actuar como en los otros campos del quehacer público. Puerto Rico necesita restaurar la credibilidad y confianza en sus procesos electorales. Estamos a tiempo”, terminó expresando el profesor.