El excongresista estadounidense George Santos fue condenado el viernes, a una pena de 87 meses (más de siete años) de prisión por cargos de fraude electrónico y robo de identidad agravado.
La sentencia se produce tras su declaración de culpabilidad en agosto de 2024, cuando admitió haber cometido 23 delitos relacionados con fraude y falsificación durante su campaña electoral de 2022.
Entre las infracciones más graves se incluyen el uso indebido de fondos de campaña, falsificación de registros financieros y robo de identidad de donantes.
Santos, quien fue expulsado de la Cámara de Representantes en diciembre de 2023 debido a su conducta, también deberá pagar una restitución de casi $375,000 y devolver más de $200,000 obtenidos ilícitamente. El fiscal federal Breon Peace destacó que, al declararse culpable, Santos finalmente reconoció la verdad “tras años de mentiras”.
Durante la audiencia, Santos expresó su arrepentimiento, afirmando que su ambición política lo llevó a tomar decisiones contrarias a la ética y que el declararse culpable era necesario para reconocer tanto su engaño hacia otros como las mentiras que se dijo a sí mismo.