En los últimos años, el fenómeno de los K-dramas ha conquistado audiencias en todo el mundo. Con tramas adictivas, personajes complejos y una producción visual impecable, las series coreanas han encontrado su lugar en los catálogos de plataformas como Netflix, Viki, y ahora Disney+. Y si bien muchos relacionan el género con historias románticas, la verdad es que los K-dramas de suspenso y crimen están marcando una nueva era de prestigio televisivo.
Este 2025, Nine Puzzles llega como prueba irrefutable de ese poder. La serie, disponible en Disney+, ha logrado en tan solo 11 episodios lo que muchos dramas no consiguen en 20: convertirse en una obsesión colectiva gracias a su narrativa desconcertante, su atmósfera asfixiante y sus actuaciones memorables.
Un rompecabezas psicológico que te atrapa desde la primera escena
Nine Puzzles arranca con una premisa poderosa: una adolescente, Jo I-na (Kim Da-mi), encuentra el cadáver de su tío junto a una pieza de rompecabezas. Es la única en la escena del crimen y, por tanto, la principal sospechosa. Años después, convertida en una brillante pero atormentada criminalista, vuelve a estar bajo el radar cuando una nueva serie de asesinatos comienza, y en todos aparece la misma pieza.
La serie, dirigida por Yoon Jong-bin, rompe con el molde del típico thriller de asesinos seriales. Aquí no se trata solo de descubrir quién es el culpable, sino de explorar las grietas de la memoria, los traumas sin resolver y la delgada línea entre víctima y verdugo.
Con una estructura narrativa fragmentada, Nine Puzzles juega con el tiempo, la percepción y la confianza. Nada es lo que parece, y cada capítulo deja una sensación de inquietud que te obliga a cuestionarlo todo: ¿Quién miente? ¿Quién recuerda mal? ¿Y quién manipula la historia?
Los protagonistas son clave en el encanto de este k-drama
Parte del encanto de esta producción radica en su elenco. Kim Da-mi, a quien ya vimos en Itaewon Class, ofrece una actuación vulnerable y feroz al mismo tiempo. Su personaje, Jo I-na, es una bomba emocional: impredecible, impulsiva, pero también profundamente herida. A su lado, Son Suk-ku interpreta al detective Han-saem, quien nunca dejó de sospechar de ella.
La tensión entre ambos no es romántica, sino existencial: se necesitan para resolver el caso, pero cada paso que dan los aleja más de la verdad y los sumerge en un terreno emocional minado. La dinámica entre ellos es tan fascinante como perturbadora.
Visualmente, la serie se inspira en el cine noir y en thrillers psicológicos como Mindhunter y Twin Peaks, con escenarios que oscilan entre lo inquietante y lo surreal.
¿La mejor serie coreana del año?
Con un tono que mezcla lo introspectivo y lo excéntrico, Nine Puzzles no busca complacerte: te desafía a pensar, a sentir, y sobre todo, a desconfiar. Su forma de contar la historia es audaz y poco convencional, pero ese es precisamente su mayor acierto.
Y el resultado es un thriller que se siente como un rompecabezas emocional que no puedes dejar de armar, aunque sepas que las piezas no encajarán fácilmente.
Así que si estás buscando tu próxima obsesión, Nine Puzzles no solo es una opción. Es una experiencia. Y posiblemente, la mejor serie coreana del año. Disponible en Disney+.