La coalición Queremos Sol culpó a Genera PR de fallar en sus responsabilidades contractuales de darle mantenimiento, reparar y operar adecuadamente las plantas generatrices del sistema eléctrico lo que provocó que el gobierno de Puerto Rico tuviera que contratar a otra empresa privada para la generación de energía temporera este verano, un costo que pasará a la factura de los clientes de energía eléctrica.
El zar de Energía, Josué Colón, confirmó que el gobierno de Puerto Rico contrató a la empresa Power Expectation LLC para la instalación de unidades de generación temporera que producirán 800 megavatios, a más de 24 centavos el kilovatio-hora. El contrato busca contar con generación temporera este verano en caso de fallas en las unidades base, o para apagar unidades a las que se les debe dar mantenimientos ya atrasados. El alto costo de producción de la generación temporera pasará a la factura de los clientes.
“El gobierno le entregó hace dos años la generación de energía de Puerto Rico a Genera PR porque supuestamente iban a operar y dar mejor mantenimiento a las generatrices para evitar los apagones. A la vez llevan vendiendo al gas natural como la solución para el país, negándose a impulsar una transición a la energía renovable distribuida. Lo que hemos vivido desde entonces es un desastre. Ahora nos vienen a pasar el costo de unidades de generación temporera porque Genera no ha cumplido con su trabajo mientras que su dueño New Fortress está al borde de la quiebra”, denunció Ingrid Vila Biaggi, presidenta de CAMBIO y portavoz de Queremos Sol.
La coalición Queremos Sol aseguró que no es sorpresa las fallas en el desempeño de Genera PR, ya que su empresa matriz New Fortress Energy (NFE) continúa en un serio deterioro económico. La semana pasada, S&P Global degradó la calificación de NFE de ‘B’ a ‘B-’ por su débil desempeño financiero y riesgos de refinanciamiento.
“La gobernadora Jenniffer González dejó claro en su Mensaje de Estado que su estrategia para resolver los problemas de generación eléctrica en Puerto Rico es convertir las generatrices de combustible diesel a gas natural o metano. El gobierno no solo está abandonando la energía solar en techos, que es la opción más viable y resiliente para Puerto Rico, sino que está confiándole la generación de la energía del país a una empresa que quiere vendernos gas metano, un combustible contaminante y peligroso, para salvarse de la quiebra”, aseguró Federico Cintrón Moscoso, director de El Puente y portavoz de Queremos Sol.
NFE mantiene un contrato para proveer gas metano a la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE); en 2023, la Autoridad de Alianzas Público-Privadas contrató a su subsidiaria Genera PR para operar la flota generatriz de la AEE. Por otra parte, la bancarrota de NFE es uno de los escenarios que podrían activar la cancelación automática del contrato de Genera PR sin que sea necesario el aval de la Junta de Control Fiscal o del Negociado de Energía.
El licenciado Pedro Saadé, abogado ambiental y portavoz de Queremos Sol, indicó que “el gobierno propuso hace unos meses rescatar a New Fortress y Genera de la quiebra pagándoles $110 millones, aunque quien en verdad lo pagaría sería el pueblo de Puerto Rico. ¿Quién va a rescatar al pueblo de este nefasto contrato? Una y otra vez, Genera ha fallado en su rol a cargo de la generación de energía, y Puerto Rico se queda a oscuras o teniendo que pagar altos costos de generación temporera. Es hora de salir de Genera”.
Por su parte, Adriana González, organizadora regional del Sierra Club de Puerto Rico y portavoz de Queremos Sol, manifestó que sustituir las generatrices a base petróleo por gas metano es continuar la dependencia en combustibles fósiles, contaminantes y que redundan en tarifas más altas para los consumidores, según fluctúa el precio del mercado. “¿Vamos a seguir atados a los vaivenes del mercado cuando hay una opción estable, viable y resiliente para generar energía en todo Puerto Rico? Queremos Sol propone un sistema basado en energía solar fotovoltaica desplegada en los techos de las casas y en comercios de Puerto Rico, respaldado por almacenamiento con baterías. Los datos y los estudios comprueban que esto reduciría los costos totales del sistema y el consumidor tendría una tarifa estable”, expresó González.