El inicio de la residencia de conciertos de Bad Bunny en Puerto Rico coincide con un renacer de colores y arte en La Perla. El emblemático barrio costero inauguró la segunda edición de la iniciativa “La Perla Pinta Su Futuro”, un proyecto de revitalización urbana y cultural que une a residentes, artistas y organizaciones para transformar su entorno y reafirmar su fuerza, historia y dignidad.
Con apoyo de la empresa puertorriqueña Master Paints, la Fundación Good Bunny y la Fundación Rimas, tres nuevos murales se integran al paisaje de La Perla.
Fotogalería
Una de las piezas es “Somos costa, somos fuerza” del muralista Héctor “Ekosaurio” López, ubicada en la antesala del Bowl. La obra utiliza la uva playera como símbolo de resistencia, pues crece en condiciones extremas protegiendo la costa, igual que La Perla ha resistido el abandono y la marginación durante décadas. Es un homenaje a la comunidad que florece y transforma su entorno con dignidad.
Otra pieza, “Raíces del Barrio” del artista Rafael Enrique “Rafique” Vega, se encuentra en una estructura abandonada cerca del cementerio. Muestra un rostro no identificado que representa la afrodescendencia viva en La Perla. Rafique integra símbolos indígenas caribeños en un estilo moderno que honra la libertad de los taínos, con patrones que conectan pasado y presente.
Finalmente, en la plazoleta, la artista Karina Taveras presenta “Aún estamos aquí”, un mural que combina piso y pared. En el suelo, una joven flota sobre el mar abrazando la bandera puertorriqueña, como símbolo de esperanza y fuerza interior. En la pared, casas coloridas se sostienen unas a otras reflejando la unidad comunitaria. El título es un recordatorio de que La Perla sobrevive y resiste con orgullo.
Además de estas intervenciones artísticas, el proyecto incluirá la primera exhibición fotográfica sobre la historia de La Perla, a inaugurarse en agosto en el recién restaurado Matadero, estructura histórica cedida en usufructo a la comunidad por el municipio de San Juan.
“Este esfuerzo no es solo pintura y color, es comunidad, orgullo y esperanza. Somos nosotros mismos, los y las residentes de La Perla, quienes estamos trabajando por nuestro entorno”, expresó Yashira Gómez, líder comunitaria.
La Fundación Good Bunny destacó la importancia de que el arte y la memoria histórica fortalezcan el sentido de pertenencia, mientras la Fundación Rimas subrayó que estas iniciativas son “actos profundos de reconocimiento a la resiliencia” de comunidades como La Perla.
Con estas nuevas obras y la energía que trae la música de Bad Bunny, La Perla reafirma su historia viva y su poder de transformar estigma en belleza, arte y dignidad.