Durante el concierto de Coldplay en el Gillette Stadium de Boston, mientras la banda interpretaba The Jumbotron Song, el vocalista Chris Martin dirigió la atención de las miles de personas a la gran pantalla. Lo que ocurrió segundos después ya es parte del imaginario colectivo de la cultura pop digital: una pareja fue captada abrazada en la audiencia, pero en lugar de besarse, ambos se separaron con evidente incomodidad.
Ella se tapó el rostro. Él se agachó, como queriendo desaparecer. El video, que fue publicado casi en tiempo real, se volvió viral en cuestión de minutos.
No solo por la reacción incómoda, sino por las identidades detrás del momento: Andy Byron, CEO de la compañía tech Astronomer, y su jefa de Recursos Humanos, Kristin Cabot.
Pero lo que pocos sabían es que detrás del clip viral había otra historia: la de Grace Springer, la fan de Coldplay que captó el instante y lo compartió en redes, sin imaginar la tormenta que desataría.
Una fan se encargó de viralizar a los infieles
Grace Springer tiene 28 años y vive en Nueva Jersey. Viajó a Boston con un grupo de amigas para ver a su banda favorita. No imaginaba que una simple reacción a la kiss cam la colocaría en el centro de una controversia internacional.
“Solo pensé que era una reacción graciosa, algo diferente. No tenía idea de quiénes eran”, declaró Springer al U.S. Sun. “Decidí subir el video porque me pareció curioso. Nunca quise causar un escándalo”.
@instaagraace trouble in paradise?? 👀 #coldplay #boston #coldplayconcert #kisscam #fyp
El clip explotó en redes sociales. En cuestión de horas, internautas habían identificado a la pareja, su empresa, cargos y hasta detalles familiares. La polémica tomó vuelo y en consecuencia, se desató una ola de hate para los protagonistas -incluyendo a una tercer persona que estaba al lado de ellos- y hasta para la fan.
¿Se arrepiente? La respuesta de Grace ante el hate
Aunque su video fue aplaudido por muchos, la fan no ha estado libre del hate. Grace ha confesado que una parte de ella se siente culpable pero la otra piensa que fue el karma actuando sobre ellos. “Una parte de mí se siente mal por darles la vuelta a sus vidas, pero… ‘juega juegos tontos, gana premios tontos’”, dijo, haciendo referencia a una célebre frase de Taylor Swift.
Grace asegura que no buscaba exposición ni likes. Solo captó lo que creyó una anécdota divertida de un show en vivo. “Espero que sus parejas puedan sanar y tener una segunda oportunidad para ser felices. Si mi video sirvió como una bendición disfrazada, entonces valió la pena”.
Su reacción ha sido considerada por muchos como insensible, mientras que otros usuarios en redes la defienden: “Si no quieres que te graben siendo infiel, no seas infiel en un estadio lleno de gente”, se lee en redes sociales.
Mientras Andy Byron y Kristin Cabot guardan silencio y la empresa Astronomer elimina discretamente referencias a sus cargos, un supuesto comunicado con las disculpas del empresario han circulado en redes sociales, sin embargo, ellos no han dado declaraciones oficiales.