La Universidad de Columbia, en Nueva York, anunció sanciones contra estudiantes involucrados en la ocupación organizada en mayo en la principal biblioteca universitaria, en protesta por la ofensiva israelí en la Franja de Gaza.
Según un comunicado oficial, el 21 de julio la junta disciplinaria, compuesta por profesores y administradores, emitió las sanciones tras evaluar cada caso individual y antecedentes disciplinarios previos. Las medidas varían desde suspensiones temporales hasta revocaciones de títulos, aunque la universidad no especificó el número exacto de afectados.
“Interrumpir las actividades académicas constituye una violación de las políticas y normas de la universidad”, señaló la institución, que defendió la creación de una “comunidad académica” basada en el “respeto mutuo” y el cumplimiento de sus políticas.
Por su parte, la asociación Desinversión del Apartheid de Columbia, que organizó la protesta, aseguró que casi 80 estudiantes fueron suspendidos por periodos de entre uno y tres años.
La organización denunció que la presidenta interina de Columbia y copresidenta de la junta directiva, Claire Shipman, en colaboración con la Administración Trump, reestructuró la junta de forma “ilegal” y removió la supervisión estudiantil y docente para imponer “multas severas” contra los manifestantes.
Durante la protesta, los estudiantes ocuparon una sala de lectura de la Biblioteca Butler, que renombraron como “Universidad Popular Basel Al Araj” en honor a un activista palestino asesinado en 2017 por la Policía israelí durante una operación en Cisjordania. Al Araj era buscado por presuntos delitos relacionados con terrorismo.