La organización palestina Hamás anunció el sábado que acepta la propuesta del presidente estadounidense, Donald Trump, de liberar a todos los rehenes israelíes que mantiene en la Franja de Gaza, tanto los que permanecen con vida como los fallecidos.
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Fue a través de un comunicado oficia que el movimiento islamista afirmó lo siguiente: “Aprueba la liberación de todos los rehenes, vivos y restos mortales, según la fórmula de intercambio incluida en la propuesta del presidente Trump”.
Hamás también expresó su disposición a iniciar negociaciones inmediatas con los mediadores internacionales “para discutir los detalles del intercambio de prisioneros con Israel”.
El anuncio se da horas después del ultimátum lanzado por Trump, quien exigió una respuesta al plan de paz antes del domingo 5 de octubre. La iniciativa del mandatario busca detener los enfrentamientos, permitir la entrada de ayuda humanitaria y establecer una administración palestina unificada en el enclave.
Hamás informó que su respuesta fue el resultado de “consultas profundas” con sus líderes, con las facciones palestinas y con los países mediadores, entre ellos Egipto y Qatar. El grupo resaltó que su decisión representa “una respuesta responsable” a los esfuerzos internacionales por detener la guerra en la Franja de Gaza.
Además, la organización destacó su reconocimiento a los esfuerzos “árabes, islámicos y los del presidente Trump” para alcanzar un acuerdo que permita el intercambio de prisioneros, la entrada inmediata de ayuda humanitaria, y el rechazo al desplazamiento de la población palestina.
Hamás también reafirmó su voluntad de entregar la administración de Gaza a una autoridad palestina independiente, conformada por tecnócratas apoyados por el consenso nacional palestino y respaldada por el apoyo político y financiero de países árabes e islámicos.
Sobre el futuro de la Franja y los derechos del pueblo palestino, el movimiento declaró que se definirá una posición nacional unificada basada en el derecho internacional, que garantice tanto la reconstrucción de Gaza como la soberanía palestina sobre su territorio.
La aceptación de esta propuesta marca un punto de inflexión en el conflicto palestino-israelí, que ha dejado miles de víctimas y desplazados. Si las negociaciones prosperan, podría abrirse la puerta a un proceso de paz respaldado por Washington y mediado por actores regionales, en uno de los intentos más ambiciosos de los últimos años para alcanzar un alto al fuego duradero en Gaza.