A veces el mejor “break” no viene solo en un paquete de chocolate, sino en forma de estiramiento, risas y un recordatorio de que trabajar sin parar no te hace un superhéroe, solo te hace sentir más cansado.
Una reciente iniciativa educativa de los chocolates KitKat promueve precisamente esto: crear conciencia sobre la importancia de las pausas activas en el entorno laboral como herramienta esencial para mejorar la productividad y la salud mental de los empleados.
A través de sesiones que integran información educativa, ejercicios de estiramiento y actividades de relajación, la marca llevó el mensaje de que el descanso también puede ser una estrategia de rendimiento.
El movimiento responde a un problema real, el agotamiento que surge cuando se normaliza trabajar sin parar, ignorando que la ciencia tiene datos claros sobre por qué los breaks no son opcionales, sino esenciales.
“Los breaks no son un lujo, son una necesidad esencial para el bienestar laboral. Culturalmente hemos normalizado el trabajar sin parar, pero en mi experiencia como abogada especializada en derecho laboral, he visto cómo empresas que fomentan estas pausas tienen equipos más efectivos y satisfechos”, explicó Melanie Rivera, abogada notaria, educadora y analista de televisión.
Por su parte, Enidsa Colón, consultora con más de ocho años de experiencia en Recursos Humanos y voz recurrente en medios nacionales, resaltó la evidencia científica detrás de estas prácticas.
“La investigación científica internacional demuestra que los periodos de descanso pueden reducir significativamente la fatiga y aumentar la energía en el trabajo, según un estudio publicado por PLOS One (2022) que analizó más de 2,300 trabajadores. Los principios del descanso y recuperación son universales y aplicables al contexto laboral puertorriqueño”, subrayó.
La iniciativa invita a empresas y empleados a unirse al movimiento para institucionalizar el “Break Hour” como una práctica que promueva la salud, la productividad y la felicidad en el entorno laboral.

