El secretario de Transporte de Estados Unidos, Sean Duffy, anunció este miércoles que la Administración de Aviación Federal (FAA) reducirá un diez por ciento el tráfico aéreo en 40 aeropuertos con motivo del cierre gubernamental, que ya se ha convertido en el más largo de la historia del país norteamericano.
“Esta decisión no se basa en qué aerolínea tiene más vuelos desde qué base. Se trata de identificar dónde se concentra la presión y cómo podemos aliviarla”, declaró el titular de la cartera ministerial durante una rueda de prensa en la que ha “anticipado que habrá más interrupciones y frustración”.
En este sentido, ha hecho hincapié en que su oficina está “trabajando con las aerolíneas, que lo abordarán con los pasajeros”.
“En última instancia, nuestra única función es garantizar la máxima seguridad posible en este espacio aéreo”, ha concluido Duffy, que no ha dado información sobre qué aeropuertos se verán afectados.
Por esta situación, la FAA del país se ha visto obligada a ralentizar el tráfico aéreo en muchos aeropuertos debido a la creciente escasez de personal de control desde que comenzó el cierre del gobierno el 1 de octubre.
Este mismo fin de semana, la entidad denunció a través de su perfil en la red social X que cerca de 13,000 controladores aéreos llevan semanas trabajando sin cobrar, criticando que se encuentran sometidos a “un estrés y un cansancio enormes”.
