Un gran jurado federal imputó este miércoles a la representante Sheila Cherfilus-McCormick, demócrata por Florida, por presuntamente robar y lavar $5 millones en fondos federales de alivio por COVID-19 y utilizar parte del dinero para financiar su campaña al Congreso, según informó el Departamento de Justicia.
La acusación detalla que Cherfilus-McCormick, de 46 años, y su hermano Edwin Cherfilus, de 51, trabajaban en 2021 en un contrato financiado por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) para servicios de vacunación contra el Covid vinculado a la empresa familiar de salud. El Gobierno federal habría pagado en exceso USD 5 millones, monto que ambos habrían desviado y movido entre distintas cuentas para ocultar su origen.
La congresista presuntamente utilizó parte de esos fondos para beneficio personal y para financiar una porción significativa de su campaña. Cherfilus-McCormick ganó la elección especial de enero de 2022 para ocupar el escaño del fallecido demócrata Alcee Hastings, obtuvo el 72.3% en las generales de ese año y fue reelegida el año pasado sin oposición.
El Departamento de Justicia también acusó a Cherfilus-McCormick y a Nadege Leblanc, de 46 años, de emplear donantes ficticios para obtener contribuciones adicionales, dirigiendo dinero de ayuda por desastre hacia familiares y amigos que luego donaban a la campaña como si fueran fondos propios.
Asimismo, la congresista y un tercer imputado, señalado como preparador de sus impuestos de 2021, afrontan cargos por declaración federal de impuestos falsa, según la acusación.
Su equipo legal afirmó que ella “es una servidora pública comprometida, dedicada a sus electores. Lucharemos para limpiar su nombre”.