El presidente de Bolivia, Rodrigo Paz, anunció este jueves la eliminación del Ministerio de Justicia tras las tensiones con su ‘número dos’ por el nombramiento de la persona que iba a encabezar esta cartera, envuelta en polémica desde el inicio.
“Se acabó el ministerio de la persecución, se acabó el ministerio de la injusticia, (…) se acabó el ministerio que era de cómo chantajear a la sociedad desde el poder político. (…) No habrá más persecución política. El Ministerio de Justicia ha muerto y lo vamos a enterrar bien para que no vuelva el terrorismo de Estado”, afirmó Paz.
El mandatario sostuvo en rueda de prensa que este paso pretende “dar garantías al sistema judicial en sus reformas” y “trabajar de forma conjunta con todas las instituciones del país en función de la justicia”. Subrayó que “si no hay justicia en Bolivia, no hay democracia” y que “si la justicia es mala, la democracia es mala”.
Paz hizo el anuncio acompañado de Jorge Franz García, quien había condicionado asumir el cargo a la eliminación del propio Ministerio de Justicia, una de las promesas de campaña del presidente.
La decisión llega tras las tensiones entre Paz y su vicepresidente, Edmand Lara, en un contexto marcado por dos nombramientos fallidos en menos de dos semanas. En primer lugar, Freddy Vidovic asumió el cargo, pero fue destituido once días después al conocerse que había sido condenado a tres años de prisión por un caso de 2015 relacionado con su labor como abogado.
Posteriormente, Paz designó a Jorge Franz García, cuyo nombramiento generó nuevas fricciones después de que el vicepresidente denunciara que tenía un “rosario de procesos” por presuntos delitos graves. García, que acusó a Lara de difamación, anunció acciones al respecto.
