La Administración de Donald Trump ha anunciado restricciones de visado contra Fritz Alphonse Jean, miembro del Consejo Presidencial de Transición de Haití, por supuestamente dar “apoyo” a las pandillas, en el marco de la oleada de violencia registrada en el país caribeño por parte de estos grupos armados.
El Departamento de Estado ha indicado que “está tomando medidas para imponer restricciones de visado a un funcionario del Gobierno haitiano por apoyar a pandillas y otras organizaciones criminales, y obstruir la lucha contra las pandillas terroristas”.
La cartera diplomática ha subrayado que Washington “mantiene su compromiso de apoyar la estabilidad de Haití y espera un progreso hacia unas elecciones libres y justas”, remarcando que “el pueblo haitiano está harto de la violencia de pandillas, destrucción y luchas políticas internas”.
“La Administración Trump promoverá la rendición de cuentas de quienes continúan desestabilizando a Haití y a nuestra región”, reza un comunicado del departamento liderado por Marco Rubio.
Tras el anuncio, Fritz Jean ha realizado una conferencia de prensa en la Villa Presidencial en la que ha denunciando que estas sanciones son una intimidación que llega después de que barajara la posibilidad de reemplazar al primer ministro, Alix Didier Fils-Aimé, por su incapacidad de resolver la crisis del país.
Durante su intervención, ha denunciado los fallos del gobierno y ha acusado a las embajadas de Estados Unidos y Canadá de ejercer presiones directas sobre el Consejo Presidencial para mantener en el cargo a un primer ministro que considera incapaz, mientras “el país se encuentra en una encrucijada donde la dignidad debe prevalecer”.
“Si la batalla por la buena gobernanza es un crimen, estoy dispuesto a continuar la batalla durante cinco años. (…) Si decirle la verdad a alguien es un crimen, estoy dispuesto a continuar la batalla durante cinco años. Si estar preocupado por un gobierno que no ha funcionado, que debe cambiar, es un crimen, estoy dispuesto a continuar la batalla”, ha manifestado.
A principios de 2024, una oleada de violencia sacudió Haití, lo que llevó al entonces primer ministro, Ariel Henry, a presentar su dimisión. Entre críticas y tras varios años de inestabilidad, había ascendido al puesto en 2021, tras la muerte del presidente Jovenel Moise en su residencia oficial a manos de un grupo de sujetos armados.
Desde entonces, un Consejo Presidencial de Transición gobierna con el objetivo de llevar a cabo la tarea de pacificación y crear un Consejo Electoral Provisional para organizar las primeras elecciones en una década. La presencia de un contingente internacional encabezado por Kenia ha resultado, hasta la fecha, ineficaz para frenar la actividad de las pandillas.
