El colectivo Queremos Sol denunció que las vistas de revisión tarifaria ante el Negociado de Energía de Puerto Rico (NEPR) han revelado decisiones “cuestionables” por parte de LUMA Energy, Genera PR y New Fortress Energy, las tres compañías que administran el sistema eléctrico del país, y que, según señalaron, continúan poniendo en riesgo la confiabilidad del servicio y encareciendo la factura de los consumidores.
“En las vistas de revisión de tarifa vemos cómo los intereses corporativos de LUMA y Genera se anteponen nuevamente a los mejores intereses de Puerto Rico. Queda claro que estas empresas velan prioritariamente por los intereses de sus corporaciones. Hemos visto como LUMA promueve la contratación de su empresa matriz Quanta levantando cuestionamientos, pérdida de fondos federales y, por consiguiente, gastos no considerados al presupuesto. Igualmente vemos como LUMA continúa tratando de zafarse de responder por los enseres eléctricos de los consumidores que se dañan por los apagones, amenazando con aumentar el costo de la tarifa”, expresó Ingrid Vila Biaggi, presidenta de CAMBIO y portavoz de Queremos Sol.
Vila Biaggi cuestionó, además, que LUMA continúe intentando desligarse de su responsabilidad en los daños a equipos electrónicos provocados por fallas del sistema, mientras sugiere aumentos tarifarios que, según organismos de defensa del consumidor, no han sido justificados.
“Desde un principio, toda esta estructura privatizadora se montó a favor de estas empresas, no de los ciudadanos”, afirmó.
Como parte de los señalamientos centrales, Queremos Sol destacó que en las vistas se evidenció la insistencia de Genera PR en continuar adelantos de conversión a gas natural de unidades generatrices adicionales, una estrategia que “ampliaría el control energético de New Fortress en el sistema”.
Asimismo, advirtieron que ese enfoque profundiza la dependencia en combustibles fósiles y encarece la operación.
El colectivo también presentó preocupaciones sobre la forma en que LUMA utiliza fondos operacionales para cubrir gastos legales y pagos relacionados a reclamaciones por su manejo del sistema eléctrico, en lugar de utilizar los sobre $115 millones destinados para esos fines, situación que “genera presión adicional sobre la tarifa”.
Asimismo, indicaron que New Fortress ha ejecutado acciones unilaterales que afectaron la estabilidad del sistema, como la suspensión del suplido de gas por disputas contractuales y la reducción de combustible tras el estallido de la guerra en Ucrania.
“Vemos la insistencia de Genera en conversiones a gas de unidades adicionales para expandir el control de suplido de gas de New Fortress. Mientras, LUMA utiliza el dinero operacional y no los sobre $115 millones que reciben, para pagar abogados y gastos relacionados a reclamos de los ciudadanos por su mala operación del sistema, lo que encarece el servicio. Hemos visto como New Fortress dejó de suplir gas contratado de manera unilateral y temeraria por una supuesta disputa con AEE, suspendió el suplido de gas a Puerto Rico tras la guerra en Ucrania y pretende utilizar remolcadores inadecuados para entrar las barcazas poniendo en riesgo la vida y seguridad de todos. Todo esto encarece y pone el riesgo el servicio”, sostuvo Maritza Maymí, portavoz del colectivo.