El presidente estadounidense, Donald Trump, declaró este lunes al fentanilo como “arma de destrucción masiva” mediante una orden ejecutiva, en el marco de la campaña militar en el Caribe y el Pacífico que ha causado la muerte de más de 80 presuntos narcotraficantes.
“Ninguna bomba hace lo que esto está haciendo, así que vamos a clasificar formalmente el fentanilo como arma de destrucción masiva”, afirmó Trump desde el Despacho Oval de la Casa Blanca.
La orden ejecutiva indica que “el fentanilo ilícito está más cerca de ser un arma química que una droga“. Según el mandatario, dos miligramos, equivalentes a entre 10 y 15 granos de sal, constituyen una dosis letal. “Cientos de miles de estadounidenses han muerto por sobredosis de fentanilo“, añadió.
Por ahora, la Administración Trump no ha detallado las repercusiones legales de clasificar la droga como arma de destrucción masiva, término reservado hasta ahora a armas “radiológicas, químicas, biológicas o de otro tipo destinadas a afectar a un gran número de personas“. El fentanilo provocó más de 80,000 muertes en Estados Unidos en 2024, según estadísticas oficiales.
Durante la ceremonia, Trump condecoró a miembros de las fuerzas de seguridad que participaron en la estrategia para cerrar la frontera con México a la entrada de inmigrantes.
En febrero de 2025, el presidente ya había designado a algunos cárteles de narcotráfico como “organizaciones terroristas extranjeras“, medida que permite justificar el uso de fuerza letal contra embarcaciones en el Caribe y el Pacífico.