El Instituto de Economía Energética y Análisis Financiero (IEEFA, por sus siglas en inglés), identificó a la empresa New Fortress Energy como “una de ls mayores amenazas para el crecimiento de energía renovable en la isla”.
Las iniciativas de la empresa para convertir plantas existentes a gas y construir más infraestructura de gas natural socavan los requisitos legales y regulatorios para aumentar la energía solar en Puerto Rico como herramienta para mejorar la confiabilidad, reducir déficits presupuestarios y garantizar la seguridad energética futura.
En 2022, el IEEFA publicó un informe que sugería, de manera contundente, que el modelo de negocio de New Fortress Energy era poco probable que tuviera éxito. Luego, esta semana, la empresa notificó a sus inversionistas que su posición como una entidad en marcha está en riesgo. Al tener activos en Puerto Rico, su bancarrota representaría problemas en el futuro financiero de la isla.
La empresa líder del gas natural licuado, que ahora está colapsando, tiene inversiones en Sri Lanka, Jamaica, Trinidad, México, Países Bajos, Jordania, Indonesia, Nicaragua, Brasil, Irlanda; y en Estados Unidos, Florida, Pensilvania, Nueva Jersey y Puerto Rico.
Las implicaciones de esta posible bancarrota para el exceso de oferta en el mercado global de gas natural podrían ser solo la punta del iceberg.