La comunidad gastronómica puertorriqueña se une a la pena que embarga a la familia del querido chef Miguel Campis, quien trascendió del plano terrenal tras una dura batalla contra el cáncer de páncreas.
Más allá de su quebranto de salud, la trayectoria de Campis se distinguió por su pasión incansable por enaltecer los sabores de nuestra tierra, su carisma ante las cámaras y su compromiso con la educación culinaria.
Desde sus inicios en la Escuela Hotelera de Puerto Rico hasta sus certificaciones en el reconocido Culinary Institute of America, Campis se posicionó como un embajador del buen gusto y la innovación.
A lo largo de más de dos décadas, trabajó en cocinas emblemáticas como el Hotel Sands, Palmas del Mar Resort y Hard Rock Café, donde apostó por una cocina moderna, ligera y accesible.Su rostro se convirtió en uno familiar para el público puertorriqueño gracias al segmento “Los Sabores de mi Tierra” en Noticentro Al Amanecer, y posteriormente compartió su sazón cada jueves en Pégate al Mediodía por WAPA TV.
Su presencia también se extendió a las redes sociales, donde inspiró a más de 29,000 seguidores con sus recetas, consejos y su proyecto CampisKitchen.
Además de la televisión, Campis publicó libros de recetas como Los Secretos del Chef Campis y Sabores de mi Tierra, obras que resaltan platos tradicionales con un toque contemporáneo.
En 2015, sorprendió al país con una transformación personal al perder 40 libras, lo que lo motivó a ofrecer talleres de cocina saludable junto a Vita Natura.
“Quiero que la gente vea que se puede cocinar rico, criollo y saludable”, expresó en ese momento.
Su familia inició una campaña de recaudación de fondos para costear su tratamiento, pero su legado ya trasciende más allá del plato.
Su historia representa un ejemplo de esfuerzo, humildad y amor por Puerto Rico.