Ozzy Osbourne, vocalista fundador de la banda británica Black Sabbath y figura emblemática del heavy metal, falleció este martes a los 76 años, según confirmó su familia en un comunicado recogido por varios medios estadounidenses.
Nacido como John Michael Osbourne en Birmingham (Reino Unido), el músico se convirtió en uno de los rostros más influyentes del rock pesado desde los años setenta. Black Sabbath, formada en 1968, es ampliamente reconocida por haber definido el sonido y la estética del heavy metal con álbumes como Paranoid (1970), Master of Reality (1971) y Vol. 4 (1972).
Tras su salida del grupo en 1979 por problemas con las drogas y el alcohol, Osbourne lanzó una exitosa carrera como solista, con discos como Blizzard of Ozz y temas icónicos como “Crazy Train” y “Mr. Crowley”. En total, vendió más de 100 millones de discos a lo largo de su trayectoria, tanto con la banda como en solitario.
Apodado “El Príncipe de las Tinieblas”, su figura trascendió la música. A principios de la década de 2000 ganó notoriedad internacional con el reality show The Osbournes, emitido por MTV, que mostró su vida familiar junto a su esposa y mánager, Sharon Osbourne, y sus hijos.
En los últimos años, Osbourne enfrentó numerosos problemas de salud. En 2020 reveló que padecía la enfermedad de Parkinson. También fue operado varias veces tras una caída doméstica y presentaba secuelas de un accidente de quad ocurrido en 2003. A pesar de ello, continuó grabando y actuando esporádicamente, con una última presentación en su natal Birmingham el pasado 5 de julio, durante el concierto “Back to the Beginning”.
La familia Osbourne informó que el músico murió “en paz y rodeado de sus seres queridos”, y pidió privacidad para procesar la pérdida. Diversas figuras del mundo del rock y la cultura popular han comenzado a rendirle homenaje en redes sociales.