El Departamento de Justicia de Estados Unidos abrió una investigación para determinar si el Departamento de la Policía Metropolitana de Washington D.C. manipuló datos sobre delincuencia con el fin de reducir la tasa de criminalidad en la ciudad.
La Fiscalía federal lidera la pesquisa, que se inició tras la suspensión de Michael Pulliam, alto cargo de la Policía Metropolitana, acusado de alterar estadísticas de criminalidad, según CNN.
El presidente estadounidense, Donald Trump, denunció que las autoridades de Washington D.C. divulgaron “cifras falsas de delitos para crear una falsa ilusión de seguridad”, y calificó la situación como “muy mala y peligrosa”, señalando que la ciudad pasó de ser la más insegura de Estados Unidos, y quizás del mundo, a ser quizás la más segura en poco tiempo”.
Para reforzar la seguridad, Trump ordenó un despliegue de la Guardia Nacional con hasta 800 uniformados, cuya presencia ya se percibe en puntos clave de la ciudad. Sin embargo, el Departamento de Justicia ajustó la orden ejecutiva para que el cuerpo dependa de las autoridades locales y no directamente del Gobierno federal.
La actual jefa del Departamento de la Policía Metropolitana, Pamela Smith, mantiene sus competencias sobre el cuerpo, mientras que Terry Cole, exdirector de la Administración para el Control de Drogas (DEA), ha sido designado responsable adicional del operativo de seguridad.