Las Fuerzas Armadas de Rusia lanzaron durante la noche del martes un nuevo ataque masivo contra territorio ucraniano, según denunció el presidente Volodymyr Zelenskyy, quien reclamó a sus aliados intensificar la presión sobre Moscú.
La Fiscalía de Sumi informó que al menos 15 drones impactaron en la ciudad de Ojtirka poco después de la medianoche, destruyendo una docena de edificios residenciales y dejando 14 heridos, entre ellos tres menores, incluido un bebé de pocos meses.
Además de Sumi, las alarmas antiaéreas se activaron en Cherníhiv, Járkiv, Poltava y Kostantínivka, esta última en Donetsk, donde los bombardeos provocaron tres muertos y cuatro heridos. Según la Fiscalía de Donetsk, las tropas rusas utilizaron lanzacohetes múltiples Smerch, dañando viviendas e infraestructuras civiles.
Zelenskyy, que regresó recientemente de Washington tras reunirse en la Casa Blanca, subrayó que los ataques evidencian la necesidad de mantener sanciones y aranceles contra Rusia. “Estos ataques confirman la urgencia de presionar a Moscú hasta que la diplomacia funcione plenamente”, escribió en sus redes sociales.
El mandatario recordó también que, en la capital estadounidense, planteó la exigencia de que Ucrania cuente con fuertes garantías de seguridad antes de cualquier eventual acuerdo de paz. “Necesitamos garantías sólidas que aseguren una paz verdaderamente duradera”, insistió.