Jeffrey R. Holland, un alto funcionario de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días que estaba en la línea de sucesión para convertirse en el presidente de la fe, falleció hoy, sábado.
Tenía 85 años.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días anunció en su sitio web que Holland murió en Salt Lake City debido a complicaciones asociadas con una enfermedad renal.
Holland lideraba un cuerpo gobernante llamado el Quórum de los Doce Apóstoles, que ayuda a establecer la política de la iglesia mientras supervisa los muchos intereses comerciales de lo que se conoce más como la iglesia mormona.
Era el siguiente miembro con más antigüedad del Quórum de los Doce después del presidente Dallin H. Oaks, lo que lo colocaba en la línea de sucesión para liderar la iglesia bajo un plan de sucesión establecido desde hace mucho tiempo.
Uno de los dos principales consejeros de Oaks, Henry B. Eyring, es ahora el siguiente en la línea de sucesión para la presidencia.
La iglesia informó que Holland estuvo hospitalizado en estos días para recibir tratamiento relacionado con complicaciones de salud en curso. Expertos en la fe señalaron que su salud iba en declive desde octubre, asistiendo a varios eventos de la iglesia en silla de ruedas.
Su muerte deja una vacante en la sucesión en la que todos son hombres de acuerdo con el sacerdocio exclusivamente masculino de la iglesia.