Los residentes de Río Piedras y líderes religiosos mostraron su preocupación por el peligro surgido tras el paso de la tormenta Ernesto. Un árbol caído sobre el tendido eléctrico está bloqueando la única vía de acceso a varias áreas críticas, incluyendo el convento de los dominicos en San Juan y una iglesia que ofrece servicios esenciales a la comunidad.
El árbol obstruye la Carretera Estatal PR-877, Camino km 1.6, en Río Piedras, la cual aseguran es fundamental para el acceso a diversas instalaciones. Entre ellas se encuentra la iglesia que distribuye alimentos a personas encamadas, y la Sala de Emergencias de Salud Conductual, que opera las 24 horas para atender a pacientes con crisis de salud mental.
La obstrucción de esta ruta impide el paso de peatones, vehículos y ambulancias, lo que pone en riesgo a los pacientes en estado crítico.
Miembros de la comunidad hicieron un llamado a las autoridades competentes para que tomen medidas inmediatas y “prevengan una posible tragedia”.
Mientras el alcalde de la ciudad capital, Miguel Romero, destacó que se han habilitado varios refugios para atender a las personas afectadas. Actualmente, hay 35 personas refugiadas en diferentes centros, incluyendo uno destinado a personas sin hogar y otro para personas encamadas. La mayor parte de los refugiados se encuentran en el albergue para personas sin hogar, el primero en abrirse al inicio de la emergencia.
Para prevenir inundaciones adicionales, se ha colocado una valla de la Policía Municipal en una calle propensa a inundarse.
El servicio de energía eléctrica también se vió afectado. A las 7:05 a.m., se reportaron aproximadamente 33,315 clientes sin electricidad, lo que representa alrededor del 13.16% del total de clientes en San Juan. El alcalde indicó que la situación podría empeorar y que se está trabajando en una cocina comunitaria para proveer alimentos y agua potable a las comunidades afectadas.
El alcalde Romero también llamó de atención sobre la situación de los sin hogar, que suelen enfrentar mayores dificultades durante las tormentas. Actualmente, 16 personas están refugiadas en el refugio de Buen Consejo, que tiene una capacidad de 25 camas. Además, se cuenta con servicios de enfermería, consejería y espacio para mascotas.
Para emergencias, los ciudadanos pueden comunicarse con el municipio a través de los números de teléfono 787-480-2222 y 787-480-2025.