En el marco del Mes de la Concienciación sobre el Cáncer de Seno, la actriz Marian Pabón comparte su conmovedora experiencia de lucha y recuperación del cáncer de seno, brindando un mensaje de esperanza y gratitud. Con la misma sinceridad que caracteriza su presencia en el escenario, Pabón abrió su corazón para hablar sobre los desafíos y victorias que ha enfrentado durante su tratamiento.
“El pueblo conmigo ha sido espectacular”, expresó emocionada.
“Yo no sé cómo voy a poder pagarles (a sus seguidores) todo lo que me han dado”, dice, visiblemente conmovida. Cada día se encuentra rodeada de apoyo y cariño, mientras personas la detienen en la calle para abrazarla y expresarle su afecto.
Afortunadamente, tras meses de inmunoterapia, el cáncer desapareció. “Ya el cáncer se fue, gracias a Dios,” confirmó con alivio. Sin embargo, el camino hacia la recuperación total sigue en curso.
Pabón enfrenta las secuelas físicas de su tratamiento: pérdida de masa muscular, dolores óseos y osteoporosis. Pero el optimismo con el que afronta cada nuevo reto es inquebrantable. “Me salvaron la vida y ahora a recuperar, si Dios permite”, afirmó con una sonrisa.
Además de luchar por su salud, ha encontrado un propósito adicional en compartir su historia. La actriz ahora se dedica a dar charlas para apoyar y educar a otros sobre el cáncer de seno. “Quizás pueda ayudar a alguien que esté pasando por la misma situación,” reflexionó.
Sus anécdotas, aunque en un principio dolorosas, hoy le arrancan una sonrisa, y a su audiencia también. Su honestidad y sentido del humor permiten que otros se identifiquen y, de alguna forma, encuentren alivio.
Pabón también destaca que, aunque el proceso ha sido arduo, ha decidido verlo desde una nueva perspectiva. “Es un momento bien deprimente, pero se vale llorar y seguir para adelante”, compartió. Con su mensaje de fortaleza, busca inspirar a otros a no rendirse, incluso en los momentos más oscuros.
Actualmente, la actriz se prepara para una última cirugía reconstructiva, en la que le colocarán implantes permanentes. A lo largo de este año, ha soportado cuatro intervenciones quirúrgicas y ha enfrentado complicaciones que incluyen una infección bacteriana y hemorragias. Pese a todo, continúa con una actitud positiva y llena de esperanza.
“El cáncer es una enfermedad espantosa”, admitió, pero su fe en que su experiencia pueda ser de utilidad para otros es lo que la impulsa a seguir adelante. Con su historia, Pabón nos recuerda el poder de la resiliencia y el valor de enfrentar la adversidad con gratitud y humor.
Para quienes deseen apoyar su trabajo y escuchar su historia, pueden adquirir boletos para su espectáculo “Más fuerte que nunca” a través de su página web, donde además comparte detalles de su recorrido y próximos eventos.
La historia de Marian Pabón es, sin duda, un ejemplo de cómo la fe y la buena actitud pueden transformar incluso los momentos más difíciles.