El Departamento de Educación (DE) concluyó que un proyecto para instalar aires acondicionados en todas las esculas de Puerto Rico costaría inicialmente $570 millones, a lo que se sumarían poco más de $30 millones anuales para su mantenimiento.
La agencia no cuenta con ese dinero en su presupuesto.
Los datos sobre el costo de un proyecto para enfrentar con acondicionadores de aire la ola de calor que azota a Puerto Rico surgieron de un estudio preliminar completado en el 50% de las 856 escuelas. La secretaria del DE, Yanira Raíces Vega compartió la información en una mesa redonda con la prensa la semana pasada. Raíces Vega señaló que su equipo, junto con expertos y comunidades escolares, implementa estrategias basadas en datos científicos, considerándolo una inversión clave para el bienestar y rendimiento académico de los estudiantes.
El costo estimado de $570 millones para instalar aire acondicionado en todos los espacios de las 856 escuelas, incluye la adecuación de la infraestructura eléctrica y civil en cada plantel. El plan abarca ajustes en subestaciones, paneles eléctricos, y modificaciones arquitectónicas en ventanas, puertas y tuberías.
El ingeniero Samir Cajigas Soto, encargado de la recopilación y análisis de datos del proyecto, detalló que se han evaluado 404 escuelas en cinco regiones y que el 21% de los espacios dispone de aire acondicionado, principalmente en oficinas y salones de computadoras. Cajigas Soto explicó que se desarrolló una plataforma para documentar las condiciones de ventilación e infraestructura y que planean optimizar recursos eléctricos con sistemas fotovoltaicos y generadores de respaldo.
Según Cajigas Soto, el 79% de los espacios requeriría nuevas instalaciones, abarcando más de 14,700 salones y áreas comunes, con prioridad en oficinas, bibliotecas, comedores, enfermerías y zonas de educación especial.
Los costos de mantenimiento anual de estos sistemas en las 404 escuelas evaluadas ascenderían a $30,158,450, incluyendo limpieza de unidades, suministro de combustible y revisiones cada seis meses.
Cajigas Soto mencionó que estudian la capacidad de techos para instalar paneles solares que podrían cubrir parte de la demanda energética, dependiendo de las características de cada región. Sin embargo, tampoco hay presupuesto identificado para un proyecto de paneles solares en las escuelas.
Raíces Vega subrayó que el próximo paso será asegurar el financiamiento, que actualmente no está cubierto por el presupuesto aprobado por la Junta de Supervisión Fiscal. Según el ingeniero José Basora Fagundo, el proyecto podría completarse en un mínimo de cuatro años, extendiéndose hasta cinco y ejecutándose en fases o por regiones según la disponibilidad de fondos.
La posible instalación de paneles solares en los techos de edificios variará según la infraestructura de cada escuela, logrando algunas una reducción de hasta el 85% en su consumo energético. En otras, los paneles cubrirían un porcentaje parcial. Durante la planificación, se proyectaron los costos de mantenimiento, inflación y crecimiento tecnológico, lo que permitirá ajustar presupuestos en función de fluctuaciones en el costo de materiales y del mercado.